lunes, 17 de diciembre de 2012

P.I.G..S. (la pregunta del millón)



Que digo yo que si los cochinos del señor Porquero vivimos todos arrejuntados y en buena armonía, compartiendo la comida, las hembras y los machos, la lluvia y el sol...
 ¿Por qué nuestros humanos parientes, que habitan en los establos nacionales de Portugal, Italia, Grecia y España, que atienden al nombre de P.I.G.S.( más el añadido de Irlanda), no se juntan y hacen fuerza común contra la poderosa Alemania antes de que su dueña y señora Doña Angela Merkel, al frente de sus bancos, hagan salchichas con ellos y se los coman bien regados de cerveza en la fiesta nacional del Oktoberfest?

Es algo que a este cochino amigo del Porquero, después de darles vueltas y vueltas, no le entra en su mollera, pues de la misma manera que, si los cochinos nos ponemos todos juntos a empujar, y no hay valla ni hembra que se nos resista, todavía no alcanzo a vislumbrar el porqué prefiere cada uno hacer la guerra por su cuenta, suponiendo que la hagan, que yo creo más bien que no.

Nota colateral del cochino amigo:
Este texto ha sido escrito por mí y publicado en el blog del señor Porquero, después de que éste, en el uso de sus facultades, lo haya censurado y expurgado de algunas expresiones que ha considerado inconvenientes, relativas todas ellas a la especial habilidad mamatoria de uno de los mandatarios de los países concernidos y abrumados por lo que llaman crisis y es una estafa. Con ello vengo a decir que el anterior escrito aparece ante el lector ratonado y disminuido. Lo digo mayormente para que el personal no vaya a pensar que soy políticamente correcto y estúpidamente moderado.

Nota adicional del Porquero:
Efectivamente, el texto que aparece del cochino amigo ha sido retocado y manipulado por mí, porque considero una mixtificación y una engañifa dar nombres propios cuando no son propios sino de los más comunes como corresponde a los políticos mediocres y tecnocráticos que nos rigen. Pensar que la Historia es protagonizada por grandes hombres con sus nombres individuales es de un idealismo infantil que asusta.  Hitler no fue menos culpable que el pueblo que lo secundó, empujado a su vez por una derrota ignominiosa y un tratado humillante que lo envió al hambre y a la muerte. Corren otros tiempos, es evidente, pero sus supuestos protagonistas, esos que aparecen continuamente con sus nombres propios en los medios, ya nos son malvados e infames sino mediocres y estúpidos, mamones y mentirosos que campan a sus anchas porque la sociedad en la que nacieron es igual de estúpida y mediocre.
¿Para qué meterse con un pobre registrador de la propiedad, por ejemplo, que será barrido para siempre por la más pequeña brisa de la Historia y pasará al olvido como tantos otros?
Mejor ocupémonos de nosotros y vayamos afilando los cuchillos.

3 comentarios:

Noite de luNa dijo...

Me apunto.

Espero que pase a la memoria, no a la historia, muy pronto.

Un abrazo

El Porquero de Agamenón dijo...

Y que vengan otros tiempos menos mediocres e infames como éstos...
Mi absoluta falta de fe y esperanza me dicta que la paciencia se está agotando y que se estan acercando los tiempos de la convulsión y el cambio.Un beso muy fuerte y bienvenida de nuevo.

Noite de luNa dijo...

Ay, señor Porquero, no me meta más miedo del que tengo.
Aquí, como supongo sabe, vamos de un extremo a otro sin darnos cuenta y con poca cabeza.

No me veo vestida de guerrillera y con un trabuco pidiendo a los que dicen no ser tan de derechas que vayan a votar. Que no les regalemos la mayoría absoluta en ningún lugar. No aprenderemos nunca.

Un Abrazo