viernes, 29 de enero de 2010

UP IN THE AIR


Aeropuerto; Área de descanso de Peter Pan.

miércoles, 27 de enero de 2010

¡ALLONS ENFANTS DE LA PATRIE...!




Colesterol, sida, tsunamis, vacas locas, terremotos, gripe A, tabaquismo nacional, terrorismo internacional… forman las plagas de Egipto con las que el complejo sanitario-mediático-medieval nos machaca obteniendo pingües beneficios. Sin embargo ningún benefactor de la sociedad incluye en sus saludables protocolos el hecho tóxico de no dejarnos vivir con tanta prohibición y tanta amenaza. El caso es darnos la vara y no tener una grieta por donde respirar. Del estrés que nos causan, no hablan.



Si hablaran de verdad, deberían cambiar la sociedad de arriba abajo. Mejores sueldos, mejores horarios. Pero de eso nada. Se conforman con prohibirlo todo y dejarnos tirados en los aeropuertos cuando nos vamos de vacaciones. De aquí a poco, nos tendremos que ir de nuevo a las barricadas y desempolvar la guillotina para cortar las cabezas de tanto curandero. El que avisa no es traidor ¡Abajo la Santa Alianza de médicos, curas y periodistas mediáticos! ¡Allons enfants de la Patrie, le jour de gloire est arrivé!



El porquero Lucien Albert Matieux de Lisle a 26 Nivôse.

lunes, 25 de enero de 2010

PROFETAS.


En verdad,en verdad os digo que los profetas siempre miran al pasado.

viernes, 22 de enero de 2010

TECNOBURROS.


No es cierto que todos los políticos sean iguales, pero sí parece que se esfuerzan en parecerlo.

miércoles, 20 de enero de 2010

AMOR Y BIOLOGÍA


Gran parte de los conflictos que abruman al ser humano son producto de un error en la perspectiva. Se les mira bajo el prisma oscurantista de la ontología o de la sicología en vez de ser vistos desde la luz meridiana de la biología. El amor es un claro ejemplo. Gran parte de los conflictos que genera se podrían resolver si no olvidáramos demasiado a menudo nuestra condición animal.

lunes, 18 de enero de 2010

EARTHQUAKES,TSUNAMIS,HECATOMBES


Somos una unidad de destino trágico en lo catódico y en lo global.

viernes, 15 de enero de 2010

TELEVISORES,PESETAS,GOLES.




Entre mis no muy abundantes pertenencias confieso que poseo dos televisores. Uno que actúa en el salón de estar y otro que yace sobre una cajonera alta del dormitorio que compartimos mi querida esposa y yo. Ambos son antiguos y gordos, pero se llevan muy bien. Los dos emiten al mismo tiempo el mismo programa de la misma misma cadena y no como otros televisores jóvenes que van por libre vía internet o playstation. Los míos no. Por eso da gusto salir del sofá del salón en medio de una jugada muy peligrosa de mi equipo en el área rival y ver como el balón entra como un misil en la portería justo cuando estoy entrando en el dormitorio de arriba.
Algún alma ruin podrá decirme que es materialmente imposible que, dada la velocidad a la que se juega el fútbol moderno y teniendo en cuenta que me acerco a los sesenta, entre que salgo del sofá, atravieso el salón y subo las escaleras, haya llegado a tiempo para abrir la puerta del dormitorio, coger el mando que suele estar perdido entre las sábanas, elegir el canal donde dan el partido, esperar unos segundos a que se encienda el aparato y gritar gol. A no ser que el gol que yo viera en el dormitorio de arriba no fuera el gol original sino una repetición cualquiera. Pues no.
Yo sé lo que veo y lo que me digo y repito que el balón que entra como una exhalación haciendo inútil la estirada felina del portero que aparece en el televisor de arriba es un gol en vivo y coleando como atestigua el grito prolongado del locutor. Un grito que, atravesando el salón, recala un momento en la cocina para beber agua y aclararse la garganta antes de emprender un vuelo veloz para depositarse en mis oídos.
El quid de la cuestión es que esa alma ruin tiene un concepto muy estrecho de la realidad. Seguro que piensa que la realidad es un bloque rígido de piedra y no un bloque blando y dúctil de plastilina como se encarga de decirnos por activa y por pasiva la ciencia moderna. Desde que el espacio y el tiempo son relativos, yo me lo creo todo. Pero tampoco hace falta recurrir a la física para explicar la realidad.Basta con analizar desapasionadamente el precio de mis televisores.
El más grande y viejo me costó sesenta mil pesetas, (trescientos sesenta euros). El más pequeño y joven cuarenta mil, (doscientos cuarenta euros). Pongo primero las pesetas y después los euros para significar que son un poco antiguos. Teniendo en cuenta que escribo en 2011, tienen trece y doce años respectivamente. Compré mis dos televisores antes de la navidad del uno de enero del 2000, que es cuando entró el euro en nuestras vidas y lo que antes era novísimo, de la noche a la mañana, se hizo viejísimo. Estoy seguro que al decir que compré mis dos televisores en pesetas, muchos lectores que tienen televisores de plasma pensarán que son mucho más viejos de lo que son y que mis sesenta años son mucho más años si lo traducimos en euros.
Algo parecido me ocurrió a mí cuando me estrené con el euro. El aparcamiento de la calle donde solía aparcar el coche pasó de valer cien pesetas de la noche del treinta y uno de diciembre a costar en la mañana del uno de enero un euro, ciento sesenta y seis pesetas con trescientos ochenta y seis céntimos. Una barbaridad.
Si lo hubiera sabido, hubiera aparcado mi coche el treinta uno de diciembre de 1999 y no lo hubiera movido del aparcamiento nunca más. Me habría ahorrado una cantidad enorme de dinero.
A la luz de este sencillo ejemplo cotidiano se explica perfectamente que la jugada peligrosa que veo en el salón transmute con toda naturalidad en gol en el dormitorio. Es más, estoy en condiciones de asegurar que mis dos televisores están indisolublemente unidos por lazos de consanguinidad. De hecho son madre e hijo. (Con los avances tecnológicos tan rápidos, un año de diferencia entre televisores puede equivaler a treinta años entre los humanos). Madre e hijo están tan unidos en la distancia que hace que la jugada sea amorosamente trasladada desde el televisor madre al televisor hijo nada más salir yo del salón. La realidad es un magma cambiante.
Incluso, a veces, he llegado a pensar que la jugada peligrosa de mi equipo en realidad se disuelve en un fuera de juego que decide no ver el televisor madre para que yo suba a donde el televisor hijo y grite con el locutor un gol que no existe. De ser así, no me queda otro remedio que pensar que yo soy el gol que, a manera de beso de buenas noches, envía a su hijo del dormitorio de arriba la madre del salón de abajo como pude comprobar una vez que grité gol y esa misma noche en el Larguero dijeron que mi equipo favorito había empatado a cero.



 

miércoles, 13 de enero de 2010

GUÍA PARA VISITAR UN MUSEO DE ARTE CONTEMPORÁNEO.


En primer lugar, dése una vuelta por el entorno del museo visitando los jardines, si los hay, y admirando la hechura del edificio, si se deja. Pague la entrada como si fuera rico y estuviera habituado a que le claven por cualquier cosa. Busque inmediatamente el cartel correspondiente a Cafetería y diríjase a ella a buen paso. No se entretenga ni demore. Las cafeterías de los museos de arte contemporáneo suelen ser eclécticas y funcionales, bien iluminadas y tranquilas. Permanezca en la cafetería el tiempo que desee aunque el café sea minimalista. No hay prisa. Aproveche de paso la cercanía de los servicios para practicar una visita agradable. Los servicios de los museos de arte contemporáneo suelen ser muy limpios y funcionales. Si por cualquier motivo ajeno a su voluntad, no pudiera hacer de vientre, salga del servicio y visite la sala que tenga más a mano. Regrese inmediatamente al servicio. Lo expuesto en la sala le asegurará una deposición rápida, abundante y funcional.

lunes, 11 de enero de 2010

FACEBOOK, TWENTI,GRAN HERMANO...

Somos nuestra propia religión. Nos hemos convertido en dioses. La realidad ya no es producto del lenguaje sino de la mirada concupiscente y totalitaria. Somos divinos por la metonímia de convertir el cuerpo en ojo que mira. Facebook,twuenti, gran hermano…Marx tenía razón: “Mirones de todo el mundo, uníos”

viernes, 8 de enero de 2010

FREAK


El friqui es un tapón en el tiempo. La juventud revenida, por alargada. Los frikis suelen tener serios problemas de retención de todo, empezando por el tiempo. Al no cagar ni mear tiempo, lo acumulan en adiposidades varias y en larguísimas estancias en casa de sus papás.

miércoles, 6 de enero de 2010

HOLANDA.

En Holanda, país del agua, todo flota suavemente.

Un cobrador de tranvía urbano decide que no pague el billete porque me bajo en la próxima parada. Una recepcionista de un museo, ante la inexistencia de un audífono en español para mi hijo, decide entregarme uno de adultos al precio de niño. La flexibilidad del sistema permite que cualquier trabajador pueda tomar decisiones.


lunes, 4 de enero de 2010

IMPORT,EXPORT.


Exportar la democracia a los países islámicos es tan absurdo como si Occidente importara cursos intensivos de cómo maltratar a la mujer.

viernes, 1 de enero de 2010

BEATUS ILLE II

Proyecto de estilo para el nuevo año y los años que vendrán.

Escribir de mí mismo, (no sé de otra cosa), con el mayor rigor y precisión posibles, eliminando por completo la anécdota, (mi vida). Mi vida, (acumulación de anécdotas), no me interesa ni a mí mismo. Lo que de mí me interesa es la transposición de mi vida a categoría. Lo que yo soy es lo que tú eres y también el otro y el de más allá. Deber ineludible; hacerse invisible para asistir como espectador a la vida de los demás. Herramientas necesarias; el laconismo, la sonrisa y la discreción. Tarea diaria; levantarse temprano por la mañana, ir al mercado, desayunar en el bar de dentro…