viernes, 10 de agosto de 2012

EL OFICIO.


Aun a riesgo de pasar por intelectual, reconozco que me causa mucho más placer leer una buena página de literatura o de historia que trabajar como actor en series clónicas de televisión. No hay color. Mientras una buena página de literatura o de historia significa un reto, las series de televisión implican una sumisión a una mediocridad abrumadora. Los mismos tics, los mismos tonos. No hay reto, tan sólo la busqueda incesante de un grieta por donde escaparse.

2 comentarios:

Noite de luNa dijo...

Desde mi reposo vacacional debo decir que todo no se puede tener y hay que claudicar a veces
¿ No cree?

Mucho besos y más

El Porquero de Agamenón dijo...

Por supuesto. No se puede tener todo.Felices vacaciones