“La creación es un acto de dolor ante el vacío”,
dicen algunos artistas y creadores que necesitan lavar el sentido de culpa ante
la sociedad por hacer de su trabajo, un placer.
A esos artistas, si son buenos, habría que
decirles que estén a la altura de sus creaciones o que dejen de crear durante
un tiempo para evitar convertirse en masoquistas.
Y si son
malos, habría que exigirles que abandonen inmediatamente su oficio, ingresen en
un monasterio y se flagelen ad libitum.
2 comentarios:
Aunque no tengo sentido de culpa, voy a buscar un monasterio de ursulinas, vacío.
Con piscina y la sombra de los pinos.
Un abrazo
Bromas aparte.
la mayor satisfacción debería ser encontrar el placer a través del trabajo.
El vació, debería venir, con la obra acabada
Creo. De arte y creación no sé mucho.
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