miércoles, 25 de julio de 2012

POLÍTICOS Y HONRAS FÚNEBRES


En España, la muerte suele servir para elevar a la categoría de gran hombre, de padre de la patria, a quien no dejó de ser una medianía. Alaban al muerto para asegurarse ellos mismos su propia ración de ditirambos. Posteridad efímera. La muerte los mata y ellos se encumbran.

2 comentarios:

Noite de luNa dijo...

No sea duro con el muerto...

Besos

El Porquero de Agamenón dijo...

No soy duro con el muerto, Soy duro con los vivos.