En España, la muerte suele servir para elevar a la categoría de gran hombre, de padre de la patria, a quien no dejó de ser una medianía. Alaban al muerto para asegurarse ellos mismos su propia ración de ditirambos. Posteridad efímera. La muerte los mata y ellos se encumbran.
2 comentarios:
No sea duro con el muerto...
Besos
No soy duro con el muerto, Soy duro con los vivos.
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