lunes, 18 de octubre de 2010

OTRA GALAXIA.




I-Este año tuve que viajar a Francia por motivos profesionales. De la Rochelle, donde estuve diez días, guardo dos recuerdos imborrables relacionados con los jóvenes y la cultura. En la bocana del puerto flanqueado por sus dos famosas torres, asistí a un ensayo general de teatro. Quince chavales de instituto, dirigidos por dos profesores de literatura, recitaban sin equivocarse ni una sola vez larguísimas ristras de versos de Racine al aire libre mientras la gente pasaba, miraba y seguía su camino. Yo opté por sentarme. Durante una hora asistí como espectador privilegiado a un espectáculo único…





II- Hace mucho tiempo estudié francés en el bachillerato antiguo. A los catorce años estuve en Francia por primera vez. Aquel viaje fue iniciático. Leí mucha literatura francesa y aprendí algunas canciones, Brassens, Brel… que olvidé. Cuarenta y tantos años después me sorprendo cantando las olvidadas canciones mientras me preparo para el trabajo en medio de una habitación muy grande atestada de gente que se afana en un montón de tareas distintas. La otra sorpresa, la grande, vino de la gente joven que se puso a cantar conmigo. ¡Los jóvenes franceses conocían las canciones antiguas de sus viejos cantantes!





III-Leo hoy en el periódico que los jóvenes del instituto Voltaire de Paris se han sumado en Francia a una huelga general nada simbólica contra la misma política neoliberal que se está practicando en España. El periódico dice que los jóvenes estudiantes se congregan una hora antes, a las siete de la mañana, en la puerta del instituto para decidir asambleariamente cada día si secundan la huelga. Una chica dice: “Protestamos porque esta reforma nos perjudica. Nos quita el trabajo o nos lo quitará. Y además, perjudica a nuestros padres. Por eso también protestamos. Por ellos”…





…Entonces no lo puedo evitar. Me viene a la memoria como un rayo la última protesta de la gente joven en España. La que se citó por Internet para hacer un garrafón de protesta contra algunos ayuntamientos que querían suprimir el que bebieran en la calle hasta altas horas de la madrugada…



4 comentarios:

Míchel dijo...

Cuanta verdad en la reflexión.

El Porquero de Agamenón dijo...

Muchímas gracias.Sea usted bienvenido.¿Ha recalado por casualidad en este blog?El suyo es muy suculento.

Argax dijo...

Demoledor.

El Porquero de Agamenón dijo...

Eso me temo.