lunes, 22 de febrero de 2010

DON DE LENGUAS




A cada uno hay que hablarle en su lengua. No se puede ser tolerante con los intolerantes. A nadie sensato se le ocurre acariciar a un león.

8 comentarios:

Opeline dijo...

Los domadores acarician leones... hazte domador

El Porquero de Agamenón dijo...

Estimada neuroparanoica.
I-Bienvenida a esta blog.
II-Lamentablemenete no puedo hacerme domador. No me gustan los animales domésticos execpto los cerdos. Los salvajes sólo me gustan en televisión.
II-Pero sí me gustan las lenguas.De hecho, soy políglota.
Un saludo del porquero

monica dijo...

Y menos si el león está furioso... Aunque hay veces que baja la guardia, y entonces, si le hablas con cariño y en voz baja, si consigues no herirle en su orgullo de león, si consigues que se enternezca un poco... entonces, se produce el milagro y es él quién parece hablar tu lengua.

Un saludo,

Una que sobrevive a un león todos los días.

El Porquero de Agamenón dijo...

Estimada señorita.
I-No sé a qué león se refiere usted exactamente pero la felicito.
II-Aunque yo me refiero a los leones indomables del fanatismo y la intolerancia.
Un afectuoso saludo.

Argax dijo...

Por eso los tolerantes tienen esa sensación de que algo falla, de que algo les falta en el mundo. Todos son mancos.

El Porquero de Agamenón dijo...

Muy agudo lo suyo señor Argax,

Unknown dijo...

Yo al león le clavo una estaca en la pata desde lejos, para que luego tenga que pedirme que se la quite.

El Porquero de Agamenón dijo...

Me parece muy bien señorita.Hay que ser cautos con los leones y los creyentes.