“Antes que mi vida está mi lucha por el derecho a volver a mi patria”. Aminetu Haidar…
…“Mi madre ingresó en el Hades de forma prematura. Ella misma puso término a su vida cuando supo que sus hijos eran hijos de su hijo. Su acto alumbró mi nacimiento y configuró mi fin. Todo lo demás; mis hermanos Eteocles y Polinices y su guerra fratricida en Tebas, el terrible decreto del tirano Creonte, Hemón, a quien elegí para no tener hijos, son anécdota y pretexto… “No conviene perseguir lo imposible”, me dijo sensatamente mi hermana Ismena, la única que sobrevivió a la sucesión de muertes que mi muerte, a su vez, produjo. Imposible oírla pues, ya desde el nombre, puedo decir que estaba impedida. Me llamo Antígona, la que está contra la vida”.
2 comentarios:
Porquero, es una rareza encontrar entradas de tantos quilates. Soy lector de los bisabuelos de nuestro siglo de oro y esta entrada me permite recordar a Antígona. Ya sabes que Antígona, en una de sus versiones, fue considerada como el mejor símbolo del espíritu de la resistencia durante la ocupación alemana. Es, en definitiva: el individuo contra el poder absoluto. Ya había intuido que eras un exquisito.
Por cierto, me han comentado que estuviste en el cóctel de inauguración de Thornton Club, he leido que el caviar no te disgustó. Pásate por el club y lee. Un saludo.
Estimado señor Thornton.
I-Muchas gracias,es usted muy amable.Con respecto a la respetabilísima señora Haidar,me sobrecoge especialmente que una madre pueda anteponer la patria a sus hijos.
II-En gustos soy heteróclito y variopinto.No es cierto lo del caviar.Para mí el caviar, la tortilla española o los boquerones en vinagre gozan del mismo aprecio pues su nivel de exquisitez es igual para mí.La democracia del gusto la suelo aplicar también al estilo literario.
Saludos.Me internaré en su fiesta.
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